Las fuertes tormentas de las últimas horas han puesto punto final a la ola de calor que ha sacudido a varios estados de Norteamérica y que ha causado al menos 42 muertos, según informa la BBC aunque otros medios hablan de cifras más altas.
Las altas temperaturas han puesto en jaque a varios puntos de los EE.UU. llevando incluso a cortes de electricidad que han dejado a miles de hogares sin energía.
Las temperaturas alcanzaron los 41 grados en Washington DC y 46 en San Louis, Missouri, el pasado sábado. En la capital de Illinois las autoridades decidieron suspender las clases de las escuelas de verano en una veintena de edificios sin aire acondicionado.
Cifras provisionales
El recuento de fallecidos provisional se reparte de la siguiente manera: 10 en Chicago, otros 10 en Virginia y Maryland, en cada uno de los Estados de Wisconsin, Ohio y Pennsylvania fallecieron 3 personas y otras dos en Tennesse.
La última de esta lista de fallecidos fue una niña de apenas 4 meses de edad que falleció tras ser dejada en un coche durante largo rato en Greenfield, Indiana.
Tras la ola de calor, fuertes tormentas
Desde el domingo las temperaturas han descendido a cotas más suaves en parte ayudadas por las fuertes tormentas que se han producido en algunos estados del medio este.
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